¿ORDEN EN LA SALA?/ GUILLERMO TERÁN

Motivado por la visita previa, fue que decidí regresar al Exconvento del Carmen para ver que nuevas propuestas ofrecían durante el mes de Octubre. Fiel a su costumbre el lugar lucía impecable, con cuidado hasta en los mínimos detalles de iluminación, acomodo y limpieza. Al recorrer los distintos salones me detuve en el que se denominaba Salón de Octubre 2007, mi sorpresa al entrar a él fue instantánea, pues si bien había bastantes piezas por admirar parecía que malintencionadamente colocaron obras de tan distintas corrientes que daba la impresión de ser un chilaquil artístico sin sentido alguno.

A pesar de ese detalle encontré con agrado algunas obras que llamaron mi atención como lo fue Venecia en Carnaval, Un Mosco que no me deja dormir, y algunas esculturas de esqueletos, sobretodo uno alado, sin embargo, fueron las pinturas las que mas me gustaron.

La primer pintura fue hecha por Leticia Schimdt Silva; en ella podemos observar un claro contraste entre las distintas clases sociales representadas en distintos personajes, la realeza mediante una dama con gesto de desagrado, los sirvientes vestidos con prendas de arlequín y antifaces en un sumo estado de seriedad, y un ciudadano representanto al vulgo como en espera de las órdenes de la dama ostentosa. Podemos darnos cuenta de lo contradictorio de la imagen con su título, pues aunque menciona un carnaval, el ánimo que se ve en el cuadro es todo serio e inexpresivo.




El segundo cuadro fue hecho en papel por Héctor Javier Ramírez, en él podemos ver un hombre que parece ser vagabundo con una expresión de tristeza y apatía, y sobre él, parado en su cabeza, un gran mosquito de anormales proporciones comparado con los que normalmente conocemos. Si lo observamos detenidamente podemos darnos cuenta de lo que representa el mosco, que vendría a ser toda aquella ansiedad y problemas que están siempre rondando nuestra cabeza y nos abogian tanto que nos pueden causar momentos de desesperación y un sentimiento de impotencia a afrontar la vida, es de esa forma que podemos entender el rostro del hombre;también todo esto guarda relación con el título, pues menciona que es algo que no lo deja dormir, no lo deja estar tranquilo.

En general uno puede tener la seguridad de encontrar exposiciones de gran calidad en este lugar, lo que si considero que se debería cuidar es no mezclar tantos tipos de obras y corrientes, pues la uniformidad también le da estilo a una muestra de arte; a veces el exceso de variedad termina siendo un elemento en detrimento de la apreciación deseable. Si en el Exconvento del Carmen logran tener un poco de mejor criterio y evitan que algunos salones parezcan una mezcla de chile, mole y picadillo, podrán mantener ese alto estándar que los distingue.
Fotos: Guillermo Terán
Foto 1. Venecia en carnaval. Leticia Schimdt Silva. 2007.
Foto 2. Un mosco que no me deja dormir. Héctor Javier Ramírez. 2007

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